Uclés y los samuráis de la Mancha
¿Podrías sobrevivir en un mundo sin ley?
PUES DESDE la caída del imperio romano… ¡ASÍ ERA ESTE TERRITORIO!
¿Te imaginas un mundo sin ley? Un mundo en el que puedes cometer cualquier fechoría si no hay testigos, y la pueden cometer contigo; un mundo en el que no puedes acudir a la justicia para que te proteja de los abusos y lo único que importa son los intereses, impulsos y ambiciones individuales; un mundo donde los malhechores huyen impunemente, cambian de identidad y empiezan de nuevo… Pues así era el mundo en el que surgió Uclés, un mundo en el que —antes de la invención del revólver—, el más fuerte siempre ganaba. Un mundo aterrador… hasta la llegada de nuestros caballeros de la Orden de Santiago, los ‘samuráis’ de La Mancha. Sigue leyendo para ver cómo ellos cambiaron la historia.
¿Dónde y Cuándo?
El Monasterio de Santiago de la histórica villa de Uclés se encuentra situado en el noroeste de la Diócesis de Cuenca, próximo a la frontera con la Comunidad de Madrid. La mejor época para visitar el monasterio es desde finales del invierno hasta comienzos del verano, pues aparte de contar un clima más adecuado a su situación geográfica, podremos admirar la belleza de la cercana laguna de Hito llena por las lluvias invernales, donde podremos disfrutar del paso de las aves migratorias —especialmente, de las grullas— si lo visitamos de noviembre a marzo.
LA GUERRa COMO FORMA DE VIDA
A menudo intentamos comprender los hechos históricos desde nuestra mentalidad moderna, lo cual es imposible. Por si eso fuera poco, en algunas ocasiones contamos con un elemento de distorsión como es conocer los hechos históricos a través de las superproducciones hollywoodienses, en las que solo hay héroes o villanos, y la realidad es que todo era infinitamente más complicado… Escucha este audio para entender un poco mejor qué pasaba en Europa y por qué.
Cuenca, una frontera entre dos mundos
Esperamos que ya te haya quedado claro cuál era la situación en Europa. En este audio te vamos a contar qué pasaba en España en estos momentos y por qué Uclés fue tan importante en nuestra historia.
Esperamos que hayas podido escuchar el audio que te explica en qué contexto surge esta gran fortaleza, cuya belleza le ha hecho ganarse el calificativo de ‘El Escorial de La Mancha’. El castillo-monasterio de Uclés lo conforman más de cuatro kilómetros de murallas y torreones, un emplazamiento completamente inexpugnable; tanto es así que nunca llegó a ser conquistado. El antiguo castillo fue reconvertido en monasterio en los siglos XVI y XVII.
Uclés no es un emplazamiento elegido al azar, es un punto clave en la comunicación entre el norte y el sur de España. Es por ello que las batallas que se libraron a las faldas del castillo (nunca dentro) han llegado a tener una importancia capital para el devenir de algunas de las guerras más importantes de la Península, como la batalla de 1108, cuyo catastrófico resultado para las tropas cristianas influyó en el futuro de los reinos peninsulares. Tras su reconquista en 1157 por los cristianos, fue donado definitivamente a la Orden de Santiago en 1174 por el entonces rey de Castilla, Alfonso VIII, para garantizar que esta fortaleza y territorio no se volvieran a perder.
un castillo que nunca fue conquistado
¿Sabías
Que...
…los caballeros medievales inventaron lo de «pasar la noche en vela»?
¿Cuántas veces habremos utilizado esa expresión, o su prima hermana “pasar la noche en blanco”, para referirnos a esas malas noches en las que, por mucho que demos vueltas en la cama, el sueño no llega? Pues ambas expresiones tienen el mismo origen: ¡nuestros caballeros medievales! Resulta que la noche anterior a ser armados caballeros, los aspirantes tenían que velar sus armas hasta el amanecer, vestidos de blanco de la cabeza a los pies, como símbolo de pureza espiritual. Ni que decir tiene que don Quijote, como buen hidalgo, cumplió a la perfección con este requisito.
Trece hombres y un destino
La Orden de Santiago nació como una hermandad de hombres de armas que quiso cambiar el curso de lo establecido, utilizando su habilidad militar para reconquistar territorios, repoblarlos y administrarlos, con el firme compromiso de ayudar a los demás desde los valores de la fe.
Debe su nombre a la gran devoción que había en esta época por el apóstol Santiago, que llevó a sus caballeros a comprometerse desde el principio a custodiar a los que peregrinaban en el Camino de Santiago. Su órgano de gobierno contaba con 13 miembros, los Trece, en referencia a Jesucristo y los 12 apóstoles.
Los primeros caballeros eran jóvenes hijos de nobles familias de todos los reinos peninsulares, que se habían dedicado al ocio y a la vida de diversión hasta que, llegados a un momento de crisis vital, eligieron renovar su vida. Fueron los encargados de conservar la recién conquistada ciudad de Cáceres y de defender y proteger las fronteras del sur.
El poder y la fama de la Orden les llevó a disponer de numerosos posesiones en los reinos de León, Castilla, Portugal y Aragón y, aunque en un principio tuvo dos sedes, una en León y otra en Uclés, la elegida como casa madre fue finalmente la localidad conquense.
Por cierto que, a lo largo de la historia, la Orden ha contado con numerosos miembros insignes. ¿Sabrías decir alguno? Por ejemplo, fueron caballeros de Santiago, entre otros, Diego de Velázquez y Francisco de Quevedo. ¡Ahí es nada!
¿Sabías
Que...
…no hay mucha diferencia entre lo que costaba la armadura de un caballero medieval y lo que costaría el traje de Iron Man?
A primera vista, la comparación puede hacernos reír, pero si nos paramos a observarlo detenidamente… ¡no tanto!
Tanto la equipación para la batalla del caballero medieval como el traje de Iron Man han sido diseñados con la tecnología más novedosa de su época (en el caso de Tony Stark, la futura), para conseguir una misión fundamental: salvar la vida del que lo lleva puesto. En el momento de crearse la Orden de Santiago, la máxima vanguardia en la tecnología militar eran las cotas de malla sobre ropa acolchada, que permitían un buen equilibrio entre movilidad y protección, pues aún no había armas de gran poder de penetración como ballestas o arcos largos, ni tecnología metalúrgica para preparar armaduras complejas y finas que pudiera sujetar un caballo.
Equipar a nuestro caballero para ir de una manera decente y digna a la batalla nos podría costar entre los 1.000 maravedíes —si fuéramos buscando ofertas—, y los 2.700 maravedíes de plata, si quisiéramos demostrar poderío y nivel.
Pasados estos importes a nuestra moneda actual, nos encontraríamos que un caballero tendría que gastarse entre 700.000 y dos millones de euros. Vamos, no llega al traje de Iron Man del magnate Stark pero ¡también había que ser millonario para poder permitírselo!
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Cómo llegar
Uclés se encuentra en la frontera entre las comarcas de la Alcarria y la Mancha, 70 km al oeste de la capital conquense y 100 km al sureste de Madrid.
Llegar en coche:
Desde Cuenca: la duración del viaje es de, aproximadamente, 45 minutos, circulando por la A-40 hasta la salida 254, donde debe continuarse por la CUV-7021 siguiendo las indicaciones hasta Uclés.
Desde Madrid: la duración del viaje es de, aproximadamente, 1 hora, circulando por la autovía de Valencia (A-3) hasta la salida 90, circulando después por la CUV-7021 siguiendo las indicaciones hasta Uclés.
Desde Valencia: la duración del viaje es de, aproximadamente, 2 horas 30 minutos, circulando por la autovía de Valencia (A-3) hasta Saelices, circulando después en dirección Uclés.
Coordenadas GPS: 39°58′50″N 2°51′41″O
Qué ver y qué hacer en Uclés y sus alrededores
la capital medieval
Muy próxima a Uclés se encuentra la ciudad medieval de Tarancón, cuya visita es un verdadero viaje en el tiempo hasta cinco siglos atrás. Su sorprendente barrio medieval es un verdadero álbum de fotos del reino de Castilla. Tarancón es, también, un lugar excelente para disfrutar de la gastronomía conquense, manchega y alcarreña, así como de sus fiestas y tradiciones, como la fiesta de los años 60 que se celebra todos los años el fin de semana siguiente al de Carnaval.
la sierra desconocida
Desde la sierra de Altomira, a solo unos kilómetros de Uclés, se pueden contemplar las extensas y hermosas vistas de los páramos madrileños y alcarreños y el norte de la Mancha. Pero este lugar no es solo un mirador excepcional, también es una reserva natural de primer orden que ofrece un paisaje natural extraordinario, combinado con un patrimonio cultural y arqueológico interesantísimo.
un yacimiento insólito
Entre los muchos yacimientos arqueológicos que alberga la Alcarria conquense, el yacimiento de la Cava, en Garcinarro, es una visita especialmente interesante por su condición de yacimiento multifásico, con hallazgos de distintas épocas, desde la Edad del Hierro hasta la época visigoda.
ITINERARIOS Y PROPUESTAS
LUCES, CÁMARA…
¡ACCIÓN!
TRAS LOS PASOS DE LOS HÉROES
HUELLAS DEL PASADO
Más sobre Uclés
El Monasterio de Santiago de Uclés —el denominado ‘Escorial de la Mancha’— forma parte de un conjunto de fortificaciones de época musulmana del siglo X que, tras su reconquista por los cristianos, fue donado por el entonces rey de Castilla, Alfonso VIII, a la Orden de Santiago, que estableció en ella su casa madre. El antiguo castillo fue reconvertido en monasterio en los siglos XVI y XVII. Por su historia y su belleza, es una visita imprescindible. La web del monasterio ofrece toda la información necesaria para preparar la visita.
Además del monasterio, el municipio de Uclés tiene también muchos otros monumentos y lugares dignos de ser visitados. Es muy recomendable pasear junto a sus murallas y perderse por sus calles y plazas, repletas de patrimonio civil y religioso. El ayuntamiento de la localidad propone un interesante recorrido para disfrutar de los puntos más importantes de la villa.
Es imprescindible degustar el vino con denominación de origen Vino de Uclés, de características muy singulares. Aunque es una de las denominaciones más recientes y pequeñas de España, compuesta por muy pocas bodegas con producciones reducidas, sorprende por su calidad y el buen hacer por parte de los agricultores, bodegueros y enólogos locales.